Irá a prisión efectiva un hombre que abusó de su hijastra cuando era una niña

El fiscal penal 2 de UDIS (Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual), Rodrigo González Miralpeix, representó al Ministerio Público Fiscal ante la Sala IV del Tribunal de Juicio del Distrito Centro, en la audiencia de debate contra un hombre de 48 años, acusado del delito de abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por la guarda y la convivencia.

En mayo de 2023, la tía de una adolescente de 15 años radicó una denuncia luego de recibir una advertencia por parte de la psicóloga de la menor, quien le contó que la pareja de su madre la había sometido a tocamientos. Según el relato de su sobrina, los hechos ocurrieron de manera reiterada por un lapso de aproximadamente tres años, desde que tenía 7 hasta los 10 años, cuando su madre se encontraba fuera del domicilio por motivos laborales.

El acusado la mantenía bajo amenazas, advirtiéndole que si contaba lo sucedido, golpearía a su madre y a su hermana, o incluso las mataría.

En entrevista en CCTV (Circuito Cerrado de Televisión), la adolescente ratificó los hechos relatados. Del informe presentado por la perito psicóloga se desprende que la irrupción de vivencias de índole sexual alteraron el curso del desarrollo de la menor e impactaron en la evolución de su psiquismo.

El fiscal González Miralpeix sostuvo que el acusado desplegó aberrantes actos atentatorios contra la dignidad e integridad sexual de la menor que implicaron un ultraje y humillación severos para su persona. El acusado ostentaba la condición de guardador de su hijastra, por lo que se encontraba obligado a tutelar por el bienestar de la misma y su condición personal, refirió.

Agregó el Fiscal que el mayor reproche a la conducta se deduce del implícito deber moral que tenía el acusado sobre la menor y el nivel de confianza puesto en él por su entorno familiar.

La jueza Norma Beatriz Vera condenó al hombre a la pena de ocho años y dos meses de prisión de cumplimiento efectivo.

Se dispuso, además, la extracción de material genético del condenado, por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato Único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.