Según lo expresó el licenciado en psicología y experto en educación emocional, Lucas Malaisi, en el programa De Buena Fuente, en la vida todos vamos a transitar toda una serie de desafíos y para ellos, gestionar las emociones es fundamental, una "una especie de gimnasio emocional para el futuro, y más que a los chicos les pueda doler enfrentarse a los sentimientos se los va preparando para ulteriores desafíos que va a imponer la vida".

Sobre este punto explicó que en el ámbito educativo son necesarias las evaluaciones o las pruebas justamente para tolerar la frustración  y mas allá que a veces tenga aspectos negativos la calificación, sirve como una herramienta. "Por ejemplo cuando están en exámenes en la universidad y desaprueban, después se genera el miedo a la situación y ya no quieren rendir más, pero en los peores casos, terminan abandonando una vocación, algo que les gusta por un fracaso o dificultad que no fue bien gestionada, por eso también deben tolerar la frustración", resaltó. 

El aspecto emocional es transversal y muy importante en todas las disciplinas donde las personas se desempeñan, en el estudio, trabajo, deporte,  vida de pareja, en las amistades. Etc., y una de las habilidades más importantes que se debe desarrollar es la empatía,  saber que siente el otro. "Por ejemplo en las escuelas, a veces el victimario cree que es un juego, pero es una persona que tiene inseguridad y genera daño", explicó el psicólogo y lo enlazó con la problemática del bullying. 

"Es un problema del occidente, está extendidísimo el culto de la imagen y las pociones económicas, o algún error que alguien pueda cometer es tomado para hostigar, molestar y hacer violencia. Es algo muy extendido, antes existía, pero no en las dimensiones que afecta hoy. Se agrava mas el cuadro por el uso de redes sociales, se hace eco de lo que antes podía ser una burla que quedaba en ese momento, y después se podía continuar una vida en libertad, pero hoy estamos atrapados en las redes que no dan respiro a nadie", sentenció. 

Al respecto dijo que lamentablemente muchos niños terminan en el  suicidio porque no ven una escapatoria o en el peor de los casos ponen fin a la vida de esa persona que les hace daño, " algunos matan o agreden gravemente, pero cuando no llegan a situaciones lamentables, también hay un costo, porque ese niño va forjando el concepto de su identidad en base de estas burlas, y hay mella en su autoestima, que se puede ver reflejado cuando quiera hacer un deporte, en la vida de pareja, en el trabajo, una persona que va estar menospreciándose". 

"Es urgente trabajar el aspecto emocional en las escuelas para prevenir todas estas problemáticas", concluyó el presidente de la Fundación Educación Emocional.