“Desde setiembre estamos con faltantes de reactivos para diagnóstico y para carga viral, donde los primeros se usan para saber si el paciente tiene VIH o no, y los de carga viral, tienen un costo más elevado, por eso la Provincia no los puede comprar, aunque desde la Dirección Nacional de Sida nos dieron una fecha estipulada para fines de marzo o comienzos de abril”, comenzó contando. 

Allí, explicó que “el reactivo de carga viral es de control, y los pocos que tenemos se están reservando para embarazadas, urgencias o casos especiales, pero en casos de buen control, los pacientes positivos tienen carga viral indetectable, por eso lo aconsejable es una prueba por año, y le pedimos paciencia”.

Por otro lado, la especialista informó que “hasta 2019, tenemos 449 diagnósticos anuales de VIH, o sea que es una epidemia estable y esto se debe a que todo el año hacemos campañas de prevención y de testeo rápido, pero siempre recomendamos un análisis por año”.

A pesar de esta recomendación, Abán señaló que “el VIH tiene una ley que protege al paciente en el consentimiento informado, por lo que, para hacerse un análisis, la persona debe dar su conformidad mediante firma, pero sería bueno que este análisis se haga en los chequeos”.

Desde su área, prosiguió, sí se evidencia preocupación porque “aumentaron los números de sífilis a nivel provincial, nacional e internacional, se constata la falta de concientización del uso de preservativo en toda relación sexual, sea con una pareja estable o no, pero ante cualquier lesión o dolor en el área genital, y ante cualquier duda luego de una práctica sexual, la persona debe acercarse al médico”.

“La sífilis no arde, no pica ni molesta, y no se la percibe, por eso la persona que la contrajo por lo general no consulta al médico, pero la infección continúa su curso, y en el 2019 cerramos con 1510 casos en Salta, pero quiero aclarar que es una enfermedad curable por lo que el paciente debe acudir rápido al médico y hacer el tratamiento”, añadió. 

Por último, se refirió a "la hepatitis, que también se transmite por vía sexual, sanguínea y vertical, donde nos centramos en la B y la C que son de transmisión sexual, y hay que decir que la hepatitis B se trata, pero no se cura, y tiene una vacuna de prevención, por lo que es importante que la persona se coloque las tres dosis, mientras que la C sí se cura”.