El 45% para los primeros seis meses de 2020 y a partir de junio una revisión que prevé un tope del 23%. Un incremento del 68% anual en la unidad tributaria cuando no existe en el municipio, ni en provincia, ni en nación un modelo de presupuesto para la ejecución de los recursos.

Hasta acá, el gobernador Gustavo Sáenz, no ha salido a cruzar a los concejales que llegaron con él al concejo, por haber votado una medida que va a contra pelo de todas las medidas económicas de emergencia que se están tomando en el marco de una economía por completo deteriorada. Un día antes de la votación, el jueves en la noche, el gobernador compartió una cena en Finca Las Costas con diputados y concejales electos, allí se habría acordado acompañar la medida de Bettina Romero. A fin de cuentas, antes de irse Sáenz había dejado en el concejo un proyecto de incremento del 55%.

El presidente de la nación Alberto Fernández ha tomado toda una serie de medidas económicas en nombre de la emergencia económica, entre ellas, ha prorrogado el presupuesto 2019, ha congelado tarifas y ha impuesto un mega paquete económico que fue aprobado por ambas cámaras la semana pasada.

Mientras a nivel nacional se congelan tarifas, en el municipio capital Bettina Romero vuelve a colocar a los propietarios de vivienda única y comerciantes como la variable del ajuste. ¿Gustavo Sáenz no hace nada?

El bloque de los concejales saencistas apoyaron el impuestazo con la excepción de la concejal Candela Correa, quien llegó al Concejo Deliberante luego de un revuelo mediático que la cuestión en su capacidad. Cande votó en contra cuando no estaba en riesgo que se apruebe el proyecto.