Una mala costumbre, desde que asumió la nueva gestión municipal de Bettina Romero, es no pagarles el salario a los trabajadores que todos los días confeccionan cientos de tiras de pan, bollos, y facturas para los comedores, hospitales y dependencias del estado. 

Todos los meses es la misma historia. El municipio llegó a deberles hasta tres meses de trabajo. Hace un mes atrás los trabajadores paralizaron la producción y solo así lograron tener una reunión con Daniel Amador, Secretario de Hacienda del Ejecutivo Municipal. En aquella oportunidad, Amador se comprometió con los trabajadores “de palabra”.

El acuerdo establecía un compromiso del gobierno municipal de pagarles el sueldo hasta el día diez de cada mes. Sin embargo, un mes después las palabras de Amador “se las llevó el viento”. Esta mañana los empleados de la Panadería Social volvieron a parar su producción y a cortar la calle porque no les han depositado los haberes del mes de octubre.

“Estamos luchando por un acuerdo escrito para que a las palabras no se las lleve el viento”, manifestó Walter Choque, vocero de los trabajadores de la panadería social, en diálogo con El Expreso de Salta. 

“No hay diálogo, no se puede tener ningún acuerdo con ellos. Por eso tenemos que llegar a la calle, y a nosotros no nos gusta, pero vamos a llevar la medida hasta las últimas consecuencias porque este es nuestro trabajo”, indicó el vocero de los panaderos.

“Nunca obtuvimos una respuesta concreta de la Intendenta Bettina Romero, no existe la decisión política, pero Pan Solidario es todo político, en campaña lo usan para la conveniencia del intendente de turno y ahora no quieren asumir que Pan Solidario es de la municipalidad”, finalizó Walter Choque.