River recuperó la sonrisa con un triunfo ante Banfield y se metió en zona de Libertadores

Con una destacada actuación de Pablo Solari y un gol final de Miguel Borja, River Plate se impuso 3-1 ante Banfield en el Monumental por la fecha 21 de la Liga Profesional. La victoria permitió al equipo de Marcelo Gallardo dejar atrás la reciente eliminación en la Copa Libertadores y reencontrarse con el triunfo en el torneo local.

Desde el inicio, el Millonario mostró superioridad, aunque le costó ser contundente en el área. Tras varias oportunidades desperdiciadas, el primer gol llegó a los 41 minutos del primer tiempo: Pablo Solari, tras recibir en el borde del área, controló y sacó un remate preciso que se coló en el ángulo izquierdo, rompiendo así una racha de más de 300 minutos sin convertir. Con esta ventaja mínima, River se fue al descanso con la tranquilidad de estar en ventaja.

 En el inicio del segundo tiempo, Solari volvió a brillar. Apenas unos segundos después del saque inicial, recuperó el balón en el mediocampo, combinó con Claudio Echeverri y, tras una pared, definió con categoría para su segundo gol de la tarde. 

 Con el 2-0, River dominó los mejores minutos del encuentro, y tanto Facundo Colidio como Echeverri estuvieron cerca de ampliar la ventaja, aunque sin éxito. Banfield, sin embargo, comenzó a equilibrar el trámite y generó algunas situaciones de peligro. A los 23 minutos, el árbitro Sebastián Martínez revisó una caída de Gerónimo Rivera en el área, pero tras consultar el VAR, decidió no cobrar penal. Más tarde, una falta de Adam Bareiro sobre Agustín Obando sí fue sancionada como penal y Leandro Garate convirtió, poniendo el 2-1 y agregando suspenso al partido.

En los últimos minutos, Banfield se lanzó en busca del empate, pero River encontró su oportunidad para sentenciar el duelo: sobre el tiempo de descuento, Miguel Borja aprovechó un rebote tras un intento de Gonzalo Martínez y selló el 3-1 con un potente remate que dejó sin chances al arquero Sanguinetti.

Esta victoria le permite a River cortar una racha de seis partidos sin ganar (incluyendo torneo local y Copa Libertadores) y llegar a 30 puntos en la tabla, a nueve del líder Vélez. Además, el equipo se consolida en zona de clasificación a la próxima Libertadores, con 57 puntos en la tabla anual, y recupera la confianza para afrontar lo que resta del campeonato.