Pasada las 8 de la mañana, en la jornada del viernes, ingresó un reporte al Sistema de Emergencias 911, por parte de un directivo de un establecimiento educativo ubicado en calle Coronel Suarez de esta capital, dando cuenta de haber recibido un llamado anónimo que alertaba sobre existencia de un explosivo en el interior del establecimiento. En consecuencia, el Centro de Coordinación Operativa envió una patrulla de la Brigada de Explosivos, que luego de una exhaustiva inspección por distintos sectores del establecimiento, determinó que se trató de una falsa alarma, o de una broma de mal gusto.

Cabe destacar, que los falsos reportes por amenazas de bomba, constituyen el "delito de intimidación pública"  tipificado en el artículo 211 del Código Penal. Esto quiere decir que quienes utilicen el Servicio de Emergencia 911 para hacer llamadas falsas o de bromas, como en este caso, una ves identificados serán llevados a los estrados judiciales a fin de establecer la sanción que corresponda por tamaña irresponsabilidad.