La primera parte fue pareja. Nadie regaló nada, sabiendo los kilates del rival que tenían del otro lado. El Blanco apuntaló su trabajo en Pegini, Girón, Churquina y la movilidad de Cuellar. Y ayudaron los demas. También hubo una primera parte de Ruiz. Así las cosas La Merced tuvo algunas chances y logró aproximarse al marco custodiado por Carlos De Giorgis. En ese lapso del partido, la más clara estuvo en los pies del Rata Zelaya que estrelló un disparo en el palo rival. Pudo y debió haber sido el gol para encarar el resto del partido con tranquilidad. Talleres también mostro lo suyo y justificó por qué era candidato.

En la parte complementaria hubo mayor cuidado. Se arriesgo menos, aunque en la última se lo perdió el delantero de Talleres Biasutti.

Llegaron los penales y en el inicio de la serie los hinchas locales quedaron paralizados, ya que Fabio Giménez falló su disparo , mientras que Talleres convirtió los dos primeros a través de Rojas y Maxi López. En las  restantes ejecuciones, falló Vera y Pegini le detuvo el penal a Martínez. En el Blanco acertaron Cuellar, Jorge Velazco y Argañaraz, cuyo gol provocó una inmensa alegría en todo el valle salteño.

De esta manera La Merced agranda su historia, y va por más. Con mucho esfuerzo y con la gran conducción de Martín Martos puso su pie en la final de la Región. Solo resta esperar lo que suceda hoy en Rosario de la Frontera entre Argentinos Camioneros y Gúemes, otro partido para alquilar balcones.

Lo importante de todo, la final la jugarán equipos salteños.