La ley 26.130 existe desde el año 2006 y garantiza el derecho para que las personas mayores de edad, en esa época 18 años, ahora 16, puedan acceder integralmente a la práctica médica de esterilización, ya sea a la ligadura de trompas de falopio o la vasectomía.

La legislación prevé que debe realizarse en hospitales públicos e incluso las obras sociales tienen la obligación de cubrir al cien por ciento la cirugía a quienes la solicitan, tan solo con una firma de consentimiento.

"Pero hay que tener en cuenta que estas son operaciones irreversibles, se puede recanalizar, pero es más complicado. Por eso, realizarlas durante la adolescencia es una locura", afirmó Gelsi en el programa De Buena Fuente.

La otra ley que complementa la ley de esterilización es la 16.150, de Educación Sexual Integral, también del año 2006, basada en ejes conceptuales de los derechos sexuales, que permite que los niños, niñas y adolescentes puedan recibir información,  y de este modo construir una vida sexual sana y responsable.

Al respecto Gelsi destacó que conociéndola, "un niño puede identificar cuáles son sus partes íntimas y asi podrá evitar un abuso sexual y podrá solicitar ayuda, o los más grandes comprenden la necesidad de cuidarse sin la necesidad de recurrir a la ligadura o a la vasectomía".

"La ESI está bien pensada, trabaja con perspectiva de género, (convicción de hacer salud para la educación y prevención), que no es lo mismo que la ideología de género que habla de un fanatismo. Una ley basada en los derechos de niños y adolescentes acorde a su edad que les habilita herramientas para tomar buenas decisiones", cerró.