"Tuvimos el honor de recibir al Procurador Abel Cornejo en el interbloque que conformamos, sin dudas, en lo personal, le tengo un respeto por su capacidad intelectual y por su trayectoria. Lo que nosotros tenemos que modificar en esta reforma constitucional es la institucionalidad. En la provincia de Salta hay que dar mayor valor a cada una de nuestras instituciones", indicó el legislador.

Sobre esa línea aseguró que el interbloque trabaja democráticamente, "tenemos una forma de trabajar democrática, si bien no existe una coincidencia con cada uno de los miembros que lo conformamos, si vamos pisando posturas colectivas y sabemos que a veces uno tiene que resignar cuando la mayoría dentro del espacio político entiende que la solución va por otro lado", explicó.

Sostuvo que en lo que refiere a la justicia la discusión no pasa tanto por cuántos años pueda estar un juez de Corte en el cargo, en los procesos de designación. "Tenemos que tener procesos que le devuelvan el prestigio a la justicia como institución y como instancia a la que el vecino pueda acceder fácilmente,  que la vea como algo cercano y que le tenga confianza", argumentó el senador.

"Es increíble que los vecinos no quieren acercarse a la justicia porque sienten que pierden tiempo y dinero, se piensa muchas veces que es mejor un mal arreglo que un buen juicio", añadió.

Sobre los procesos de designación manifestó que deben conformar la Corte "quienes realmente sean los más preparados, y con trayectoria. Tienen que ocupar esos cargos de tanta relevancia institucional y  prestigio los más aptos".

Subrayó que sobre ese postulado estarán direccionadas las propuestas del interbloque, "la reforma judicial tiene que ir acompañada de una serie de cuestiones que por ejemplo, garanticen la participación de las mujeres en la Corte, hasta quizás nos atrevemos a sugerir que el número de miembro quede establecido en la Constitución o al menos que se establezca un tope, no puede pasar que gobernador designe a alguien nuevo porque quiere tener a alguien de su confianza adentro".

Finalmente dijo que no está a favor de los mandatos vitalicios de los jueces en la Corte, "no sería conveniente para la institucionalidad los cargos vitalicios, deberíamos fijar una edad a partir de la cual deberían acceder, cerca de los 50 años cuando la persona haya adquirido una experiencia importante y trayectoria, ya sea en los pasillos de tribunales como abogado litigante o ocupando algun cargo de la provincia. No pueden ser eternos en sus lugares hay que ir marcando una renovación".