En los '90 se produjo un ajuste estructural del Estado donde la venta de los activos nacionales y provinciales fueron moneda corriente, y el sistema público era acusado de elefantiasico y de generar más cargas impositivas a los usuarios.

En ese contexto se enriquecieron los sectores privados y los servicios regulados por el Estado, de igual manera a lo ocurrido durante el gobierno macrista.

"Ahora hacen lo mismo, son empresas con muy pocas máquinas, todo lo tercerizan, a partir de las reformas neoliberales durante el gobierno menemista se planteó que todo se compra y todo se vende y la prestación del servicio tan escencial como luz agua y cloacas son vistos como una mercancías más. Así surgen los entes reguladores para que las empresas cumplan los contratos. En los últimos 30 años los servicios financieros y el sector de los servicios regulados por el Estado ganaron muy bien, y que desde 2015 con el gobierno macrista y del PRO la rentabilidad de las empresas y del sector financiero el incremento fue extraordinario se liberó prácticamente", explicó el también docente universitario de historia Correa.

"Desde el radicalismo decimos que cuando Macri llegó en diciembre y  dijo 'ganó Cambiemos pero el gobierno es del PRO', nosotros sostenemos que se hagan cargo de sus actos. Señalamos permanente los errores en desición que golpeaban el poder adquisitivo de los usuarios y que se ponía demasiado énfasis en la inversión productiva y el resultado está a la vista: el crecimiento de la curva ascendente tanto del sector financiero como los servicios regulados por el Estado los extraordinarios fueron extraordinarios.Macri golpeó duramente a los asalariados y le dio ganancias a las empresas de los servicios públicos", concluyó.