“Escuelas Eco Amigables”: Alumnos salteños convierten residuos en oportunidades

Este jueves por la mañana, la Escuela Mitre 4008 fue escenario del lanzamiento oficial del programa “Escuelas Eco Amigables”, una iniciativa impulsada por la Dirección de Educación Ambiental de la Municipalidad de Salta. Ramiro Ragno, titular del área, brindó detalles sobre esta propuesta que busca sembrar conciencia ecológica desde las aulas y promover la gestión responsable de residuos.

“Estamos dando apertura a una experiencia piloto de un proyecto que se llama Escuela eco amigable”, anunció Ragno, quien remarcó que esta etapa inicial se desarrollará durante 30 días en seis instituciones educativas ubicadas en la zona norte y noroeste de la ciudad. “En esta ocasión, solamente son 6 escuelas, de la zona norte y noroeste de la ciudad, que se animaron a practicar la experiencia”, agregó.

El proyecto involucra directamente a los estudiantes de 7º grado, quienes asumirán un rol activo en la campaña ambiental: “Los 7 mos grados de estas escuelas, se transforman en promotores ambientales, y van a tratar de incentivar la conciencia de la gestión de los residuos en todas las escuela”.

Durante un mes, los alumnos separarán papeles y botellas plásticas en sus instituciones. El objetivo es que comprendan que estos elementos no son basura, sino recursos transformables. “Durante 30 días van a tratar de separar papeles y botellas plásticas, de manera que entiendan que eso son recursos que se pueden transformar”, explicó Ragno.

Una vez finalizada la campaña, el próximo 30 de mayo, los materiales recolectados serán vendidos. La empresa Eco Norte, que se sumó al proyecto, pagará un precio diferencial, premiando el compromiso de los jóvenes. “Posteriormente, ellos van a vender esto y la empresa Eco Norte, que se suma a la propuesta, pagará un precio diferencial al final de la campaña que será el día 30 de mayo”, señaló.

Más allá del aprendizaje ambiental, el proyecto tiene un impacto social y económico directo: los fondos recaudados podrán ser utilizados por los estudiantes para su cena de egresados, chomba o viaje de fin de curso. “Con el dinero, los chicos van a poder financiar la cena, la chomba o el viaje de egresados, que es algo que deben decidir ellos como grupo. Los directores de las escuelas, son los que van a supervisar las transacciones”, aclaró el funcionario.

“Queremos que los niños y sobre todo, la comunidad educativa, entienda que los recursos separados y clasificados realmente son una oportunidad de ingresos económicos”, concluyó Ragno. La expectativa ahora es que esta propuesta crezca: “Luego, las escuelas eco amigables, se van a abrir, la idea es que a todas las escuelas de la ciudad”.