Cómo sigue la salud de Pablo Grillo, el fotógrafo que recibió un disparo de gas lacrimógeno en la cabeza

El fotógrafo Pablo Grillo, quien sufrió un grave traumatismo craneoencefálico tras recibir el impacto de una cápsula de gas lacrimógeno en la cabeza durante los incidentes en el Congreso, continúa internado en el Hospital Ramos Mejía. A pesar de la gravedad del cuadro, su padre informó que se mantiene estable y que la última intervención quirúrgica mostró signos positivos.

El hecho ocurrió el pasado miércoles en el marco de la marcha de los jubilados, donde se registraron enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad. Grillo fue trasladado de urgencia y desde entonces permanece en terapia intensiva con asistencia mecánica respiratoria y sedoanalgesia. Su pronóstico sigue siendo reservado.

El estado de salud del fotógrafo Pablo Grillo
Fabián Grillo, el padre del fotógrafo, brindó declaraciones este sábado y señaló que la segunda intervención quirúrgica, realizada en las últimas horas para tratar un hematoma cerebral, tuvo un resultado positivo. “Está estable. Y el hecho de que esté estable en este cuadro es bueno", dijo el hombre en diálogo con C5N.

Y añadió: “La segunda intervención de ayer fue positiva. Hay una lucecita con todo lo que ocurrió: con la evolución de la primera y de la segunda operación”. “En realidad no sé si es exactamente así, pero yo lo quiero tomar así. Fue la primera vez que los médicos usaron la palabra evolución positiva”, advirtió Fabián Grillo.

El hombre explicó que la operación fue por un hematoma que se encontraba del lado opuesto a la última intervención a la que se sometió el mismo día del incidente, el pasado miércoles 13 de marzo: “Notaron que había un crecimiento del hematoma, como que hay una pérdida. Entonces había que hacer la cirugía”, indicó. También manifestó que la inflamación debería comenzar a bajar “después de cinco o seis días”, según le explicaron los médicos a cargo de su hijo.

Desde el hospital informaron que el fotógrafo continúa con soporte hemodinámico y que su estado requiere monitoreo constante. Además, se mantiene la necesidad de dadores de sangre para su tratamiento. “Para poder donar, es necesario presentarse, desde este jueves a las ocho de la mañana, en el hospital Ramos Mejía, ubicado en la calle General Urquiza al 609, en la Ciudad de Buenos Aires”, señalaron.

  Falta de respuesta del Gobierno nacional y la señal de apoyo de la Ciudad
En cuanto al acompañamiento institucional, Fabián Grillo manifestó su descontento al confirmar que ni el presidente Javier Milei ni ningún funcionario del Gobierno Nacional se comunicó con la familia tras lo sucedido. En contraste, destacó que el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, sí se acercó al hospital para ofrecer su apoyo.

Los dichos del hombre coinciden con el posteo que Quirós realizó en su cuenta de X (ex Twitter), en el manifestó: “Esta tarde visité a los heridos de mayor gravedad durante los incidentes ocurridos ayer en las inmediaciones del Congreso, para acompañar a sus familias y agradecer el trabajo de los equipos de salud que brindaron atención inmediata”.

Por su parte, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, afirmó en los últimos días que el policía que disparó la granada lo hizo “como dicen los manuales”, aunque según especialistas debería haber sido hacia arriba y no hacia el frente como fue. La funcionaria, en entrevista con LN+, dijo que la granada rebotó contra el suelo o la “barricada”, “con tal mala suerte”, que “le pegó en la cara”.

Asimismo, Bullrich dijo que la grave herida del reportero fue "consecuencia de aquellos que generan violencia". "Lamentamos mucho su estado, pero quien utilizó el arma no letal la utilizó de manera correcta. Rebotó en una barricada que habían hecho los militantes violentos y por eso cambió la dirección y le pegó al fotógrafo militante", comentó en una conferencia de prensa.