Todo estaba listo, todo estaba preparado, casi 15.000 almas esperando una jornada histórica frente a una pobre versión del archi rival de todos los tiempos. Una jornada de muchos goles, como habían anticipado casi todos los medios. Y estaba bien. Razones para imaginar un festival de goles había. Si hasta nosotros las argumentamos. De todas maneras y aunque no hubo goleada, la gente se fue feliz tras el 1 a 0 conseguido gracias al gol de Pablo Calderón y que correspondió a la fecha 9 del torneo Federal.Además tras el final de la fecha, el Cuervo finalizó en el segundo lugar a tan solo dos puntos del Racing cordobés.

Metiendonos en el partido, se debe mencionar que los primeros 45 minutos fueron tal cual uno se lo imaginó. Central intentando tomar las riendas del partido, y el Santo esperando meter alguna contra. Por momentos se hizo parejo y por momentos prevaleció la pierna fuerte de algunos jugadores.

Central insistía con la movilidad de sus delanteros, especialmente Magno y el aporte de Chavarría por las bandas. Precisamente por un quite de Chavarria, estuvo cerca de abrir el marcador.

 A los 22 minutos, Diego Magno ejecutó un tiro libre indirecto y envió un centro pasado que encontró a Calderón, ganandole  la posición a Carlos Churquina, el defensor azabache estiro la pierna y decretó la apertura del marcador y la explosión en las tribunas.

Pese a la escasez de llegadas, Juventud respondió mediante una triangulación que terminó en un centro para Villa, pero el remate del Tanquecito encontró bien parado a Hass, ahogando el grito del empate. Esa y un remate de Nallim fueron las únicas chances de la primera parte para la visita.

En el complemento, Central tuvo muchísimas  oportunidades para ampliar su ventaja, pero careció de eficacia a la hora de la definición, Además el arquero Gonzalo Gómez regresó del descanso para convertirse en la gran figura de la tarde y responsable absoluto del escaso 1 a 0.

Por ejemplo, a los A los 8 minutos, el Sacha Magno superó en velocidad a su marcador, pero por el achique del  arquero,  no tuvo ángulo para definir. También Reyes tuvo el gol,pero salvó Goméz en gran volada. Y para seguir con su gran tarde, el palo lo ayudó devolviendo un remate de Berrondo

Sobre el final, nuevamente el Pelado Gómez, con una excelente atajada, ahogó lo que pudo ser el grito de gol de Fabricio Reyes.

No hubo más tiempo. Juventud se perdió rápidamente a los vestuarios, pensando cómo sera la semana tras perder frente al clásico rival y pensando que pasará con Martín Martos. Central se fue feliz, no goleó pero lo pudo haber hecho. mostró orden y cosechó su cuarto triunfo al hilo. Y además empeiza la semana segundo en la tabla. ¿qué más puede pedir?

Foto: Gentileza Realidad Deportiva