Bonorino dijo que trabaja en la defensa del pueblo frente al accionar del estado y las instituciones relacionadas con el mismo, por ejemplo si el PAMI funciona mal en cuestiones administrativas, le corresponde a la Defensoría intervenir. "ANSES tenía problema con los turnos y cuando hay una queja real, iniciamos una operatoria a través de dos procesos: uno es directo donde lo hacemos nosotros y otro indirecto que depende de Buenos Aires. Entendemos también en cuestiones federales como en YPF", indicó.

"Nosotros no tenemos injerencia directa sobre el funcionamiento de las prestadoras de servicio pero en gran medida participamos porque nos parece que debemos hacerlo. Tenemos centenares de quejas sobre luz, gas, agua y el no atenerse a las leyes principales como derechos del niño, a la mujer, etc. Tratamos de llegar lo más pronto posible pero hay una limitación con otros organismos, cada uno da a conocer el caso desde el lugar que le corresponde", agregó.

El delegado manifestó que el año pasado hubo muchas quejas pero lo que más llamó la atención fue que había un "ANSES paralelo", que daba turnos a cambio de dinero para iniciar trámites jubilatorios. "No tenía la queja formal pero es un delito y tiene que ser denunciado, es lo primero que se tiene que hacer. Con la información que se brinda, automáticamente se atrapa a la persona. Tenemos que eliminar esto porque nos destruye como sociedad, tenemos que atender estos problemas porque nos desmoralizamos aunque seamos beneficiarios. Nadie quiere ser corrupto pero el problema es que no les dejan otra alternativa", aseveró.