Verónica Figueroa estuvo al tanto de cada uno de los reclamos que se dieron durante el mes de enero y en una entrevista aclaró que en estos días mantuvo un diálogo con las trabajadoras y que la situación “finalmente” se pudo arreglar. El resultado fue la firma del 100% de los en CPI, niñez y el 95% en otros hogares; y en adultos mayores, de 73 personas, solamente 3 no firmaron. “Hemos hablado mucho en las últimas semanas con las trabajadoras, por eso extendimos una semana más la firma de contratos, para que nadie se quede sin la oportunidad de tener este beneficio. Valió la pena hablar, e incluso pusimos una mesa de consulta en Niñez y Familia para que todos puedan sacarse sus dudas”, puntualizó la ministra de Desarrollo Social.

A pesar de los partes de prensa, las notas y la cartilla del proyecto “Cuidando a los que cuidan”, la excusa de todo este problema fue la falta de comunicación que existió entre el Ministerio de Desarrollo Social y la gente de Primera Infancia, Niñez y Familia. 

Lo que pasó semanas atrás, fue que muchas trabajadoras precarizadas se acercaron a firmar sus respectivos contratos pero no se encontraban en las listas, lo que las llevó, entre otras cosas, a manifestarse, ya que no querían perder su fuente de trabajo. Al respecto, la ministra aclaró que todo estaba disponible en cada una de las áreas y que nunca se sacó a nadie de los listados. Observó que en las redes sociales muchas personas no tenían el conocimiento o los detalles de números y de los beneficios que presenta este contrato. “Ahora están con mucha más información y extendimos la firma de contratos para que nadie pierda esta oportunidad ya que el programa tiene muchos beneficios para todos los trabajadores”, precisó la funcionaria.

Entre esos beneficios, Figueroa comentó que es importante llevar las herramientas necesarias a aquellas personas que cuidan a niños o adultos mayores y que para ello se dará inicio en el mes de marzo a capacitaciones que brindarán diferentes instituciones académicas para que estos trabajadores puedan hacer sus actividades de la mejor manera. 

Finalmente, la ministra de Desarrollo Social informó que al día de hoy firmó el 100% de CPI, el 95% cabecera y niñez de los hogares, el 95% de adultos mayores y que está al tanto de aquellas trabajadoras que no firmaron y que ya se comunicó con ellas para conocer sus motivos.

 

Hay algo que evidentemente molesta a las trabajadoras y es el monto del nuevo contrato. “De los $28.000 que cobramos con el contrato, tenemos que pagar el monotributo, es decir, AFIP, casi $2500, Rentas $3000 y también nos descuentan de la obra social. Prácticamente más de 6000 pesos se nos va y nos queda muy poco en el bolsillo”, detalló una trabajadora a El Expreso de Salta. 

Sin embargo, pese a la disconformidad no les quedo otra opción que firmar el contrato para no perder su única fuente de ingreso. Ahora, reclaman el pago por el mes de diciembre, que todavía no ha sido depositado.

“Puede ser que el 100% haya firmado, el tema es que fueron presionadas porque la ministra se cerró en que el contrato iba a quedar como estaba. En la reunión, ella nos informó que no iba a cambiar de postura, que el que quiera permanecer trabajando que firme y sino que se retire del sistema. No sabemos qué vamos a hacer porque todavía nos deben diciembre y el aumento del que se habla prácticamente no existe con todo lo que tenemos que pagar”, cuestionó la trabajadora que pidió que no se la identifique para no tener problemas laborales.