En la reunión, los Senadores solicitaron a los que representantes de ENREJA que tengan "una mirada más federal", dado que "la pandemia provocó una importante desfinanciación en clubes deportivos y sociales, centros vecinales, ONG e instituciones de la más diversa índole de todo el territorio provincial".

Ante esta situación, plantearon los legisladores, "la mayoría debió acudir a la realización de bingos, rifas o a la venta de bonos contribución, como única herramienta financiera, dado que no podían organizar torneos, festivales u otro tipo de eventos presenciales; con el agravante de no conseguir ingresar en el calendario anual que fija ENREJA, o no tener conocimiento acabado de los trámites a seguir para lograr una habilitación".

En representación de ENREJA, estuvieron su presidente y vice, respectivamente, Aníbal Caro y Adrián Amen, quienes recordaron que "los juegos en Salta están regulados por la Ley 7020 y que en el caso de los bingos, existe una reglamentación especial que los coloca por fuera del comercio del juego, por entender que se trata de una herramienta para recaudación de fondos que utilizan las entidades sin fines de lucro".

Allí, contaron que "en pandemia aparecieron bingos organizados por particulares y a través de redes sociales, que obligaron al organismo a dar intervención a la fiscalía y a las fuerzas de seguridad, dado que desde el año pasado, el juego clandestino dejó de ser una contravención para convertirse en un delito".

Amén dijo que "el organismo trabajaba con una programación anual en la cual se autorizaba hasta 4 bingos a una misma institución, pero en breve se avanzará en una nueva resolución que limitará a 2 bingos anuales para poder habilitar fechas para solicitantes del interior de la provincia".