Desde el retorno de la democracia, todos los 24 de marzo, el pueblo argentino marcha en memoria de los desaparecidos y asesinados de la última dictadura cívico militar, por la verdad, y el pedido de justicia con los responsables del genocidio. El primer año que no se realizó la masiva movilización, fue el 2020, debido a que a esa altura del año, se implementó el ASPO por el COVID-19. “A nivel nacional, la primera decisión fue no marchar este 2021, sin embargo, Encuentro, Memoria, Verdad y Justicia decide convocar a movilizarse. Porque ahora es importante, no sólo por la memoria sino para repudiar los hechos de violación a los derechos humanos, de las mujeres a quienes nos matan cada 20 hs, y de la comunidad LGBTQ”, confirmó Marcela Gutiérrez, de la organización Coca Gallardo. Y agregó que “hay que demostrarle a la derecha -que se muestra tan fácilmente delante de los medios poniendo bolsas que simulan ser cuerpos con las caras de los dirigentes de DDHH, políticos y sindicales-, que nosotros también vamos a marcar nuestra presencia en la calle."

Los organismos de derechos humanos, organizaciones sociales y familiares de detenidos y desaparecidos marcharán el 24 de marzo, concentrando a las 10 de la mañana en Plaza 9 de Julio para luego movilizarse hasta el Portal de la Memoria ubicado en el Parque San Martín, con el cumplimiento de los protocolos correspondientes.

Nora Leonard, histórica militante de los derechos humanos y referenta de la Asociación Lucrecia Barquet remarcó que “es importante el recuerdo de nuestros compañeros que fueron masacrados, exiliados, detenidos, desaparecidos por luchar por un mundo más justo y más humano. Los militares dieron este golpe para sembrar el terror y aplicar un plan económico de entrega de nuestro patrimonio nacional". Y reflexionó: “no tendría que haber un solo muerto en Argentina si se hubiera atendido el reclamo de la gente y la distribución de la riqueza".

Sobre el escenario en el cual se inserta esta jornada, Blanca “Nenina” Lezcano, de Familiares Detenidos y Desaparecidos, explicó que el contexto se encuentra agravado por “la participación de Gerardo Morales en el golpe de estado en Bolivia, las elecciones en Ecuador, la represión en Paraguay y Brasil con el gobierno de Bolsonaro”, que evidencia “un avance de la derecha”. Por su parte, Leonard denunció que “hay gente que hoy hace apología del delito; en esta provincia tenemos un Ministro de Seguridad (Juan Manuel Pulleiro) que es negacionista y es muy grave negar el genocidio que hubo en Argentina. Hay diputados que también lo niegan: (Ignacio) Jarsún y (Gustavo) Orozco, que está acusado de tortura y sigue ahí”. Sobre el gobierno nacional, la referenta sostuvo que “si bien tenemos un gobierno que tiene la intención de respetar los DDHH, falta mucho por hacer todavía”. Además, alertó sobre la necesidad de avanzar con los juicios de lesa humanidad y sostuvo: “nos morimos nosotros, y se mueren los asesinos".