Regional: Central ganó en Perico y otra vez aparecieron los violentos

La “Perla”, pleno en su poder aniquilador, anotó en los minutos 18, 26 y 46 de la segunda parte. Además, en ese segundo tiempo se las ingenió para pivotear y permitir la llegada de sus compañeros.

Luego de un primer tiempo muy cerrado y en donde las defensas prevalecieron por sobre los ataques, llegó el segundo tiempo que no solo se caracterizó por la llegada de los goles sino también por las muy buenas actuaciones de Martín Esparza en el local y de Fabricio Reyes en el equipo visitante.

En ese segundo tiempo fue vital la aparición de Reyes a los 18 minutos porque Talleres comenzaba a dominar al cuervo y a generaba permanentes llegadas. Sobre todo por el sector izquierdo visitante, donde Burruchaga no podía parar a Esparza.

A los 26, Reyes capturó un rebote y definió junto al palo izquierdo  ante la desesperación del arquero y los defensores de Talleres.

Con Central arriba 2 a 0, Talleres logró encontrar el merecido descuento. Maximiliano López derrotó a Pegini mediante la ejecución de un penal, pero como era la gran tarde de Reyes, el goleador apareció en el epílogo y convirtió el tercero de su equipo y de su cuenta personal. Tan importante fue ese gol que no soló liquidó el partido sino que, además, acerca a los salteños al sueño de jugar la final de la Región Norte.

Sobre el final y mientras se jugaba tiempo de descuento aparecieron las lacras de siempre. Los violentos disfrazados de hinchas que no se bancaron la derrota y pretendiendo entrar al campo de juego. Con intenciones de agredir a los jugadores de Central Norte.

Por  eso, el árbitro Nelson Bejas decidió suspender el partido. Ahora será el turno de la revancha en Salta. Solo resta esperar si será en el estadio azabache o si se seguirá jugando en el estadio Martearena.

 

Talleres (Perico) (1): Matías Llanos; Nicolás Riveros, Jorge Serrano, Milton Blanco y Miguel Matías; Mauricio Vilca, Diego Pascuttini, Martín Esparza y Mauricio Aguirre; Maximiliano López y Darío Zampini. DT: Gustavo Módica.

Cambios: Facundo Espinoza por Mauricio Aguirre.

 

Central Norte (2): Mauricio Pegini; Leandro Beterette, Federico Rodríguez, Patricio Krupoviesa y Eduardo Burruchaga; Nicolás Issa, Osvaldo Young, Matías Iglesias; Lucas Quiroz; Diego Nuñez y Fabricio Reyes. DT: Ezequiel Medrán.

Cambios: Francisco Peinado por Nicolás Issa, Ronaldo Martínez por Diego Núñez y Francisco Ortega por Lucas Quiroz.

Estadio: Plinio Zabala
Árbitro: Nelson Bejas
 

Goles: ST: 18' Fabricio Reyes (CN), 26' Fabricio Reyes (CN), 31' Maximiliano López (T), 46 Fabricio Reyes (CN).

Cuando muchos pensaban que este sería un encuentro en el marco del respeto y la cordura, aparecieron los intolerantes que no aceptan la superioridad deportiva. Ocurre en casi todas las canchas, pero algún día las autoridades tendrán que asumir el tema con responsabilidad. No solamente hubo una lluvia de cubitos de hielo en contra del goleador Reyes, que lo único que hacía, además de convertir, era festejar mesuradamente y sin provocaciones sus goles. La tribuna local, igual lo atacó con violencia. Una vez que Reyes convirtió el tercer, los hinchas periqueños rompieron el tejido de alambre e ingresaron al campo de juego con intenciones de agredir al árbitro y a los jugadores visitantes, una reacción ilógica, que ni la autoridades del club y tampoco la policía pudieron controlar. Entonces, el árbitro dio por finalizado el encuentro. Ahí vino lo peor. Los jugadores locales en una actitud solidaria deciden salir del campo juntos a sus pares de Central Norte, sin embargo ese gesto no alcanzó para los violentos, y uno tuvo la criminal idea de lanzar un petardo sobre los jugadores cuervos del que resultaron varios heridos o latismados (Ver video adjunto) Las autoridades cuervas no descartaron la posibilidad de presentar una denuncia contra Talleres. "Cuando vimos que había jugadores lastimados, le pedimos a la policía que pidieran una ambulancia. 'No podemos, no tenemos acá' fue la respuesta"; contó un allegado cuervo que dijo que se protegió en el vestuario de las agresiones de los jujeños. Lamentable.